Otra hermanita

Nuestra pequeña tiene 18 meses y dentro de poco tendrá una hermanita. Desde que nació nuestra pequeña el tiempo pasa muy rápido, a veces no nos damos cuenta pero tener un hijo al lado te hace ver el tiempo desde otra perspectiva. Nosotros podemos cambiar muy poco de un año a otro, pero lo que ellos cambian en unos pocos meses es increíble... los primeros pasos, la risa, los juegos e incluso su ropa. Lo que antes era ropa de bebé ahora se me antoja ropa gigante ¿Tanto ha crecido nuestra bebé en poco más de año y medio? Eso me pone un poco triste, porque el tiempo que ha pasado ya no va a volver pero a la vez disfrutar cada vez más de los juegos con ella es una alegría.

Pronto todo volverá a empezar, hace menos de un año le preguntamos a J si quería volver a repetir toda esta aventura con nosotros, se lo pensó durante un par de días y finalmente ¡dijo si! El proceso es básicamente lo mismo, excepto que esta vez no hemos tenido que viajar a Estados Unidos en el inicio del proceso y que la confianza que tenemos en J después de estos casi tres años de relación nos da mucha tranquilidad. 

Con nuestra primera hija todo fue perfecto a la primera, desgraciadamente esta vez tuvimos que intentarlo dos veces hasta llegar donde hemos estado. Como ya he comentado en otros post los tratamiento de fertilidad son muy caros en Estados Unidos por lo que cada intento estábamos especialmente nerviosos ya que, dado que es el segundo proceso, no podíamos intentarlo más de un par de veces. Afortunadamente nuestra segunda vez fue todo bien y ahora mismo estamos de 21 semanas.

Ya estamos con preparativos, alojamiento, vuelos... Esta vez de forma muy especial porque iremos con una niña de casi dos años. 

Seguiremos informando próximamente.

Por fin estamos con nuestra pequeña!!!

Por fin llegamos a la meta, tanto tiempo esperando, tanto esfuerzo, emociones en la distancia y por fin tenemos a nuestra pequeña en brazos. Con mucho sueño pero muy felices.

Finalmente el parto fue inducido por decisión de J, y por su decisión estuvimos presentes acompañándola todo el tiempo. Verdaderamente es una wonderwoman, decidió no tomar ningún tipo de analgésico durante el parto así que ni epidural ni nada parecido...El parto en sí duro poco, al menos para nosotros y J aunque tuvo un problemilla después del parto se marchó a casa al día siguiente.

Los días en USA con nuestra niña pasan rápido, nos vamos adaptando ella a nosotros y nosotros a ella, seguimos una rutina de biberones, arruyos, baño, pañales y visitas al Walmart pero creo que tendremos un recuerdo precioso de nuestra estancia aquí. Mientras hemos quedado con J, con su hermana, amigos e hijos que nos tratan como si formásemos parte de su familia.

Por lo demás el papeleo para llevar a nuestra hija a casa sigue en marcha, ya tenemos su partida de nacimiento en la que aparecemos los dos como padres y estamos esperando recibir en unos días el pasaporte.

Algún día podremos contarle la historia de su nacimiento a nuestra pequeña, toda la tensión, el esfuerzo, los líos en otro idioma, las noches sin dormir pero aprenderá la moraleja que algunos sueños aunque parezcan imposibles pueden conseguirse con constancia, esfuerzo y encontrando a las personas adecuadas como Surrobaby que están con nosotros en cada momento, Nicole y A Host of Possiblities y la clínica ICRM de Idaho...Y por supuesto nuestra encantadora J, sin la que nada de esto hubiera sido posible, a la que tenemos que agradecer el regalo más grande que nos ha dado la vida y también a su familia que nos está tratando como un americano más.

Llegamos a USA!!!

Ha sido un viaje largo después de:

-Tres vuelos con un total de diecisiete horas entre esperas y trayectos.

-Rotura de las maletas al llegar al destino (Delta nos lo arreglo en el momento dándonos una maleta igual a la que se había roto).

-Un trayecto desde Las Vegas a St. George sin GPS (nos habíamos pasado a Vodafone porque el roaming con ellos no tiene coste, y al llegar a destino e intentar abrir Google Maps nos damos cuenta de que nuestros teléfonos no son compatibles con la red 3G de aquí, pero nos apañamos).

¡Pero por fin llegamos! Cansados pero ilusionados. Llevamos un par de días en St. George (una ciudad pequeña en el centro de un paisaje típico de películas del oeste), y casi no nos ha dado tiempo a nada básicamente hemos quedado con J y con su familia para pasar la tarde y conocernos mejor en persona ya que por Internet es algo impersonal, también le hemos acompañado al médico a la revisión que tenía. Su doctora nos recibió al grito de: You are the family of the baby! Ha sido muy agradable y nos ha transmitido mucha confianza. Además hemos aprovechado para hacer las compras en Walmart, a parte de los objetos diarios que necesitaremos en nuestro mes aquí, hemos cogido varias cosas en especial para la niña ya que es imposible traerlo de España. Básicamente un carrito con silla para el coche y una cuna de viaje que intentaremos llevar con nosotros a España si la aerolínea lo permite.

Compras americanas para nuestra hija.

Seguimos con la cuenta atrás, esta semana o la siguiente ya seremos padres y lo que hace un año parecía algo imposible será un sueño realizado. ¡Qué poco queda!