Hace tiempo ya comenté que esto es una carrera en fondo... Así me definieron un proceso de gestación subrogada hace tiempo. Y es cierto, además es una carrera en la que la meta es un sueño, una ilusión, pero nada es seguro. Puedes estar años cultivando esa ilusión, años ahorrando, esfuerzo, sacrificio...Y nunca llegar a nada.
Podíamos habernos conformado, podíamos haber decidido ser sólo dos, viajar, dormir tranquilos, vivir en una casa más grande, tener los último de Apple cada año y dedicarnos a nosotros mismos el resto de nuestra vida. Pero decidimos arriesgarnos, nos embarcamos en esta aventura de final incierto todo por un sueño: formar una familia. Y no hemos llegado hasta aquí tomándolo como una vanalidad. Cada poco tiempo era una noticia, una esperanza que iba formándose durante más de un año, noches en vela, preocupación, alegrías y también decepciones.
¿La mayoría de la gente tomaría este camino?¿O se conformaría con "lo que le ha tocado"?
Sin el apoyo de J, que está cuidando de nuestra niña durante estos meses, todo hubiese sido diferente. Su positividad, su ilusión con lo que está haciendo por nosotros, alegría, implicación... Esta claro que es una wonder woman y nos lo demuestra día a día, hemos tenido una suerte inmensa de conocerla y de emprender este camino con ella.
